Editorial
Bueno Saber! Tomate industrial: !los productos ganadores!
04/06/2019
La fase de floración ya está completa y para el tomate industrial ha llegado el momento de hacer cuentas. Es a partir de ahora que se deben tomar medidas para el resultado final, en términos de rendimiento, tamaño y calidad. Si es abundante, la floración sin duda ha predispuesto las plantas para una productividad alta, que sin embargo debe ser apoyada con tratamientos apropiados.
En fertirrigación, ILSA recomienda utilizar ETIXAMIN DF e ILSAPOLICOS, desde el final de la floración (día 65°-70°) y durante toda la fase de crecimiento, hasta el inicio del envero. ETIXAMIN DF es un fertilizante en microgránulos hidrosolubles con alto contenido de nitrógeno totalmente orgánico (16%) y con más de 90% de aminoácidos, mientras que ILSAPOLICOS es un bioestimulante radical completamente vegetal, a base de algas, levaduras, betaína, polisacáridos y con triacontanol de origen natural, que estimulan positivamente el metabolismo de las plantas de tomate.
Aplicados cada 3-5 días, a una dosis de 15 kg/ha ETIXAMIN DF y 5 kg/ha ILSAPOLICOS, proporcionan nitrógeno orgánico y aminoácidos, favorecen el reequilibrio de las sustancias nutritivas al interior de la planta, permitiendo cultivar una mayor cantidad de frutos. Los dos productos pueden ser aplicados en mezcla con nitrato de calcio y otros fertilizantes minerales, gracias a su absoluta miscibilidad con casi cualquier formulación.
En el mismo período y siempre mezclados con productos para la defensa, los productos foliares que marcan una diferencia son: ILSASHAPE, ILSAMIN CALCIO y ETIXAMIN BIO-K, formulados de acciones específicas para el aumento de calibre, que permiten un crecimiento regular de los tomates, evitando la manifestación de podredumbre y malformaciones que pueden perjudicar la calidad final.
Los abonos ILSASHAPE, ILSAMIN CALCIO y ETIXAMIN BIO-K todos a base de GELAMIN®, gelatina líquida para uso agrícola, gama de producción exclusiva ILSA, combinan los efectos nutricionales de nitrógeno orgánico y de los aminoácidos de hidrólisis enzimática a los de la betaína y del calcio en la resistencia de los tejidos y del potasio en la acción antiestrés y de estimulación de la maduración.
Aplicados cada uno a 250 g/100 litros de agua, producen una respuesta significativa tanto sobre el aumento de tamaño de los tomates como en la salud de las plantas, que deben ser fuertes y eficaces para lograr la maduración de los frutos.
Al inicio del envero, cerca un mes antes de la cosecha, la obra viene completada con ILSAGRADER, un formulado de acción bioestimulante que, aplicado 2-3 veces cada 7 días, a dosis de 300 g/100 litros de agua, termina las características de calidad de los tomates.
El otro contenido de potasio, azufre, betaína, alginatos y otros extractos vegetales permiten transferir a los frutos lo que la planta ha producido en las fases anteriores y aumentar los valores de grados Brix, sustancia seca y consistencia, parámetros fundamentales para todas las diferentes variedades de tomate industrial.
Por lo tanto, los fertilizantes y bioestimulantes de ILSA permiten alcanzar valores óptimos para todos los parámetros clave para los tomates industriales, con ventajas indiscutibles, en términos económicos, tanto para el productor como para la empresa procesadora.